efecto de los terremotos

Según sus últimos cálculos, el terremoto del 26 de diciembre desvió la posición media del Polo Norte de la Tierra unos 2,5 centímetros (1 pulgada) en la dirección 145 grados longitud este, más o menos hacia Guam en el Océano Pacífico. Este movimiento sigue una tendencia sísmica a largo plazo identificada en estudios anteriores.

El temblor afectó también la forma de la Tierra. Chao y Gross calcularon que el achatamiento de la Tierra en los polos (aplanada en la cima e hinchada en el ecuador) disminuyó una pequeña cantidad —aproximadamente una parte en 10 mil millones. Esto confirma la tendencia de que los terremotos hacen la Tierra menos aplastada en los polos. Esto la vuelve más esférica.
También detectaron que el terremoto disminuyó la longitud del día en 2,68 microsegundos. (Un microsegundo es la millonésima parte de un segundo.) En otras palabras, la Tierra gira un poco más rápido de lo que lo hacía antes. Este cambio en la velocidad de rotación está relacionado con el cambio en el achatamiento de los polos. Se parece a un patinador de hielo que sitúa los brazos más cerca al cuerpo produciendo un giro más rápido